En el mundo actual, cada vez más empresas reconocen la importancia de ir más allá del desarrollo económico, destinando fondos para el cuidado ambiental y el bienestar social, un conjunto de acciones asociadas con el término crecimiento sostenible.
El impacto ambiental y la explotación indiscriminada de recursos naturales, aunado al contexto político y social, inciden en el futuro de las organizaciones y la estabilidad financiera de la población.
Adoptar un enfoque integral que considere estos factores (desarrollo económico, cuidado ambiental y bienestar social) permite alinear las necesidades de la empresa, sin comprometer los intereses de las futuras generaciones.
¿Pero, qué es el crecimiento sostenible y cuáles son los beneficios que supone para las compañías que apuestan por su aplicación? A continuación, abordaremos en profundidad estos puntos de interés.
¿Qué es el crecimiento sostenible?
El crecimiento sostenible es un modelo de gestión que toma en consideración el impacto social y ambiental que puede generar la organización a largo plazo, como parte de su proceso de desarrollo financiero.
Para integrar este paradigma en las políticas de la organización es preciso implementar prácticas tales como el uso de fuentes de energía renovables o materias primas procedentes del comercio justo.
La conservación del ambiente, el apoyo a las comunidades locales y la reducción de la huella de carbono empresarial (gases de efecto invernadero emitidos directa o indirectamente por la compañía), están vinculadas con el crecimiento sostenible.
En este sentido, la innovación tecnológica es otra forma de aplicar este modelo de gestión en la organización, aprovechando avances científicos y técnicos que optimicen los procedimientos internos y tengan una menor repercusión en el entorno.
El crecimiento sostenible facilita a la empresa la expansión a largo plazo, a través de prácticas comerciales éticas y responsables, en contraposición con entidades que privilegian la búsqueda de ganancias inmediatas, a cualquier costo.
La empresa multinacional brasileña de cosméticos Natura, fundada en 1969, es un ejemplo del modelo de gestión orientado al crecimiento sostenible. La compañía ha creado programas de reforestación y conservación de la biodiversidad.
Asimismo, la compañía es conocida por el control sobre sus emisiones de carbono; la utilización de materiales reciclables y plástico verde (procedente de la caña de azúcar); el uso de ingredientes de comercio justo y sus productos cruelty free.
¿Por qué es importante el crecimiento sostenible?
Existen diferentes razones por las que el crecimiento sostenible es importante. En primera instancia, se trata de un modelo de gestión que promueve el equilibrio entre el desarrollo económico y la conservación ambiental.
De la misma forma, toma en cuenta tanto el impacto económico de las decisiones estratégicas impulsadas por la empresa, como los efectos sociales que dichas medidas puedan ocasionar en la población y comunidades vulnerables.
El crecimiento sostenible también es clave para crear una cultura de innovación en la compañía, priorizando soluciones creativas que fomenten el uso responsable de los recursos sin comprometer la competitividad, la productividad y la calidad.
Es relevante señalar que las empresas que adoptan el crecimiento sostenible mantienen un mayor compromiso social, a la vez que desenvuelven resiliencia frente a las fluctuaciones del mercado y nuevas regulaciones legales.
Beneficios de un crecimiento sostenible a largo plazo
Como modelo de gestión o paradigma centrado en el delicado equilibrio entre desarrollo económico, preservación del ambiente y bienestar social, el crecimiento sostenible conlleva diferentes beneficios, entre ellos destacan:
- Reputación empresarial
Las compañías que integran el crecimiento sostenible a su esquema de trabajo generan más confianza entre los consumidores y aumentan la competitividad de cara a sus rivales comerciales.
- Reducción de costos
La implementación de soluciones alternativas, innovación disruptiva y nuevas tecnologías para mejorar procedimientos, productos y servicios repercute en el aprovechamiento de recursos y la reducción de residuos y costos.
- Diferenciación
Promover la creatividad en la búsqueda de soluciones sostenibles a los problemas de la empresa crea un diferencial con respecto a la competencia, destacando de otras opciones similares presentadas al público objetivo.
- Protección ambiental
Las prácticas sostenibles favorecen la conservación de los ecosistemas locales y sus especies, minimizando el impacto humano negativo y la sobreexplotación de los recursos naturales.
- Relaciones de confianza
Así como el crecimiento sostenible mejora el posicionamiento de la empresa en el mercado, posibilita la creación de alianzas y relaciones de confianzas con industrias que mantienen el mismo enfoque de gestión.
- Oportunidades en otros mercados
Las prácticas sostenibles generan oportunidades de incursionar en nuevos mercados, en la misma área de especialización de la organización, u otros campos relacionados.
- Fidelización de los trabajadores
El bienestar social, como uno de los ejes principales del crecimiento sostenible, no se limita a la población externa, sino que igualmente debe tener presente las condiciones de trabajadores, colaboradores y proveedores.
Invertir en optimizar la experiencia de estos tres grupos se traduce en la fidelización de los profesionales y mejoras de las condiciones laborales. Esto también aumenta el prestigio de la empresa ante reclutadores y potenciales talentos.
6 acciones para el crecimiento empresarial sostenible
Para aplicar el crecimiento sostenible, las empresas deben estar dispuestas a implementar cambios significativos en sus políticas, como:
- Integrar la sostenibilidad en la estrategia corporativa y los procesos inherentes a todas las áreas de trabajo.
- Monitorizar el impacto social y ambiental de las acciones ejecutadas por la compañía y compartir esta información con las comunidades y autoridades competentes.
- Invertir en investigación y tecnología sostenible que contribuya a reducir costos, optimizar procesos, crear valor en productos y servicios y diferenciarse de la competencia. El uso de plástico verde por Natura es ejemplo de ello.
- Implementar prácticas sostenibles o amigables con el ambiente, tales como políticas de reciclaje y ahorro energético.
- Incentivar la formación y el desarrollo de los empleados como medio para la actualización de competencias y mejoras en la calidad del ambiente de trabajo.
- Nutrir relaciones de confianza con proveedores y clientes, basadas en la transparencia, la confianza y el respeto.
El crecimiento sostenible no es solo una tendencia. Es un modelo de gestión indispensable para el futuro de las empresas que tienen como objetivo garantizar su viabilidad a largo plazo, sin descuidar el ambiente y el bienestar social.
Fuente: https://www.concur.com.mx/blog/article/que-es-el-crecimiento-sostenible